La Televisión estatal iraní, Al-Alam, ha anunciado que el lanzamiento del “Sejil 2”, un misil tierra-tierra con capacidad para alcanzar objetivos situados a 2.000 kilómetros de distancia, se ha realizado con éxito y ha alcanzado el blanco propuesto. En declaraciones a medios locales el Ministro de defensa de Irán, Ahmad Vahidi, ha afirmado que el artefacto lanzado esta mañana se diferencia de cualquier otro (vídeo y texto en árabe) que se haya probado anteriormente. Según el Ministro iraní el “Sejil 2” no puede ser “derribado por misiles antimisiles, debido a la gran velocidad con la que entra en contacto con el aire y posteriormente colisiona la tierra”, además aseguró que este misil está dotado con sistemas que impiden su detección por radares.
Lanzamiento del misil “Sejil 2” por Irán, 16/12/2009
La noticia de este lanzamiento hizo saltar la alarma en los Estados occidentales donde las reacciones no se hicieron esperar. Así el portavoz de La Casa Blanca, Mike Hammer, ha manifestado que “el ensayo balístico iraní pone en duda el carácter pacífico de su programa". Mientras que el Primer Ministro británico, Gordon Brown, desde Copenhague, donde asiste a la Conferencia de la ONU sobre Cambio climático ha afirmado que se trata de “un asunto de gran preocupación para la comunidad internacional y justifica que avancemos en la imposición de sanciones”. Por su parte el Ministro de Relaciones Exteriores francés, Bernard Valero, considera el lanzamiento por Irán del misil “Sejil 2” como “una muy mala señal hacia la comunidad internacional”.
Este nuevo desafío de Irán Occidente llega tan sólo un día después de que el Congreso estadounidense haya aprobado nuevas sanciones contra el país asiático, con el objetivo de obstaculizar su programa nuclear. Las medidas aprobadas establecen la imposición de sanciones a las empresas que exporten gasolina a Irán, tales como la prohibición de que actúan en EE.UU o la imposibilidad de recibir financiación de las instituciones de este Estado. Irán ha repetido en reiteradas ocasiones que este tipo de medidas de castigo no van a alterar su actuación, ni van a conseguir que desista de su programa nuclear, afirmando que el mismo tiene como objetivo únicamente la producción de energía nuclear con fines civiles.